Los posibles focos de infección quedaron sellaron entre el
12 y el 14 de diciembre
Los datos sobre el brote de
legionella detectado el pasado 11 de diciembre en nuestra localidad afecta ya a
205 personas, de las cuales 46 están ingresadas y, de ellas, seis se encuentran
en estado grave en la UCI.
De los afectados más graves,
cinco se encuentran en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital de
Ciudad Real y otra en la del Hospital 'La Mancha Centro', de Alcázar de San
Juan, según han confirmado fuentes de la Consejería de Sanidad, quienes han
precisado que ayer tuvo que ser ingresada otra persona más en la UCI del centro
sanitario ciudadrealeño.
A pesar de los quince nuevos
casos registrados en las últimas 24 horas, las autoridades sanitarias han
confiado en que el número de afectados disminuya en estos próximos días, ya que
todos los posibles focos de infección quedaron sellaron entre el 12 y el 14 de
diciembre para evitar nuevos contagios.
El aumento de casos, después de
que ayer finalizara el periodo de incubación de la enfermedad, según ha
explicado el director general de Salud Pública de Castilla-La Mancha, Manuel
Tordera, puede estar determinado porque los pacientes suelen ir al hospital
cuando tienen más de un síntoma y no cuando empiezan a padecerlo.
De los posibles focos tan solo
dos han dado positivos, una fuente ornamental cercana a la estación de
autobuses y una torre de refrigeración de una empresa privada situada en las
inmediaciones, en el polígono industrial de Manzanares.
Los responsables sanitarios
trabajan con el centro nacional de Microbiología de Majadahonda en Madrid y la Universidad
de Valencia, para confirmar si en los cultivos de las muestras de los dos focos
detectados hay células vivas y, en caso de que fuera positivo, identificarlas y
compararlas con las que padecen los enfermos.