La triste realidad es ésta. Las cifras de afiliados a la
Seguridad Social cae de forma sistemática mes tras mes. El desempleo, salvo
discretas mejoras puntuales, producto de situaciones estacionales como en
verano por la actividad turística, o en determinadas épocas de actividad
agraria por recolecciones, el desempleo crece sin que el Gobierno tome una sola
medida para frenarlo, o lo que es aún peor, sin reconocer una realidad social,
que puede llevar a nuestro país a un estallido social sin precedentes.
Lo más sangrante de todo, es que parecen no darse cuenta de
la espiral de pobreza en que se está instalando la sociedad española
Es urgente, en la línea de las actuaciones de la Diputación
Provincial de Ciudad Real, en materia de empleo, la puesta en marcha de Planes
de Empleo, que permita sacar de la situación de extrema necesidad en que se
encuentran cientos de miles de familias. ¿Qué hace Cospedal sin invertir ni un
solo céntimo de euro para desempleados? ¿Qué hace el Ayuntamiento de Manzanares
en este sentido? ¿No prometieron empleo a cambio de votos? ¿Dónde está el
empleo?
Todo lo que prometieron, era mentira. Todo lo que nos
cuentan, es mentira. Sin duda, el pueblo, como siempre, dictará su veredicto en
las urnas.
Lo más sangrante de todo, es que parecen no darse cuenta de
la espiral de pobreza en que se está instalando la sociedad española. ¿Quién
quieren que vaya al pequeño comercio a consumir, si la gente no dispone de lo
necesario para comer o vestir? ¿Quién creen que puede sacar adelante la
actividad comercial de este pueblo, si cada vez son más familias que no
disponen de un salario que llevar a casa?
Sólo un cambio radical, de la política social y fiscal,
-haciendo que paguen más los más tienen-, puede establecer un giro en esta
dramática situación. Dicho giro es, impensable, con los actuales gobernantes
del PP, que trabajan única, y exclusivamente, al servicio de los grandes bancos
y los monopolios, llevando a nuestro país, a unos niveles de pobreza sin
precedentes...
Todo lo que prometieron, era mentira. Todo lo que nos
cuentan, es mentira. Sin duda, el pueblo, como siempre, dictará su veredicto en
las urnas.