El equipo de gobierno socialista reprocha al Grupo Popular que, por primera vez, rompa el consenso y no vote a favor de los intereses de Manzanares en el conflicto del agua con Membrilla
Ante la nueva
licitación del servicio, se adapta a la ley de contratos del sector público
El pleno del Ayuntamiento de
Manzanares aprobó este lunes la nueva ordenanza del agua. Se trata, según el
equipo de gobierno, de una “adaptación terminológica” de la anterior ordenanza
a la Ley de Contratos del Sector Público ante la licitación del servicio que se
hará este año. El Grupo Popular se abstuvo y los socialistas le reprocharon
que, por primera vez, no votara a favor de los intereses manzanareños en el
conflicto del agua con Membrilla.
La nueva ordenanza reguladora de la prestación patrimonial de carácter público no tributario por los servicios públicos de abastecimiento de agua potable, alcantarillado y depuración sustituirá la ordenanza fiscal vigente para adaptar su texto a la Ley 9/2017 de Contratos del Sector Público. Se aprobó con los votos a favor del Grupo Socialista y del concejal no adscrito, José María Molina-Prados. El Grupo Popular, se abstuvo.
Según el Grupo Socialista, se trata básicamente de sustituir el término tasa por el de tarifa, según la citada ley. Además, tras el último contencioso con el Ayuntamiento de Membrilla, el Tribunal Supremo obligaba a realizar este cambio. “No cuestiona nada más”, según el portavoz del equipo de Gobierno, Pablo Camacho, quien dijo que la sentencia del TS sobre la anterior ordenanza fiscal “tiene aspectos muy positivos” para Manzanares ya que reconoce que la propiedad, la titularidad y la concesión del agua son del Ayuntamiento de Manzanares y califica “inadmisibles” el resto de pretensiones del consistorio de Membrilla.
Esta adaptación de la ordenanza,
que los populares reprocharon que no se hiciera antes ya que la Ley de
Contratos del Sector Público es de 2017, se ha hecho ahora, según el equipo de
gobierno, coincidiendo con el último año de concesión del servicio de aguas,
cuyo concurso público debe hacerse en los próximos meses.
José María Molina-Prados apeló a
que acabe este conflicto y dijo que “está claro” que los pozos son de
Manzanares y que Membrilla debe arreglárselas. Por ello, apoyó la nueva
ordenanza.
Para el Grupo Popular, la citada sentencia del Supremo “puede abrir la puerta” a futuras reclamaciones del Ayuntamiento de Membrilla, según declaró su alcalde. Por ello, al no coincidir con el equipo de gobierno en la interpretación de la Sentencia, los populares no votaron a favor de la nueva ordenanza y se abstuvieron.
El equipo de gobierno reprochó
que, por primera vez, el Grupo Popular rompiera el consenso en este conflicto
“que empezó cuando en Manzanares y en Membrilla coincidieron gobiernos del PP”,
recordó alcalde de Manzanares, Julián Nieva, que calificó de “preocupante” esta
falta de apoyo y que la portavoz popular, Rebeca Sánchez-Maroto, utilizara los
argumentos del alcalde de Membrilla en lugar de defender los intereses de
Manzanares.
Nieva hizo un llamamiento a la
unidad en el tema del agua, fundamental para el desarrollo de Manzanares.
Recordó que los gobernantes de Membrilla son los que aprobaron que sus vecinos
paguen el agua más cara y los que dejaron de pagarla durante 10 años a
Manzanares -que es quien tiene la propiedad, la titularidad y la concesión-, e
insistió en que deberían buscar soluciones de autoabastecimiento. Mientras
tanto, aclaró que Manzanares no le va a negar el agua a los vecinos de
Membrilla.
Todo este debate sobre el agua se dio en varios puntos de la sesión plenaria, ya que además de a cuenta de la ordenanza, se reprodujo en la desestimación de las alegaciones de Membrilla a la aprobación de la estructura de costes para el futuro contrato de concesión de servicio de suministro de agua potable y alcantarillado, asunto en el que el PP y el edil no adscrito se abstuvieron por la falta de tiempo para estudiarlo, ya que se trató de urgencia; y en una interpelación de los populares sobre la citada sentencia del Supremo.
Estación de ferrocarril
El pleno, que duró dos horas,
también abordó la situación de la estación de ferrocarril habida cuenta de una
interpelación del Grupo Popular en la que su portavoz denunció el estado
“tercermundista” de las instalaciones y acusó al alcalde de ser “cómplice” de
la inacción de Adif ya que las obras “llevan siete meses de retraso”. También
calificó de “casualidad” que se anuncien las obras después de que el PP
denunciara este tema hace unos días con una nota de prensa.
El alcalde de Manzanares
respondió que será también “cómplice” de que se vaya a solucionar, igual que lo
ha sido del arreglo de la estación de autobuses o de un largo listado de
infraestructuras y mejoras “que han transformado esta ciudad en los últimos diez
años” sin el apoyo de los populares. Julián Nieva recordó que siempre ha
expresado su “vergüenza” por el estado de la estación y que así se lo hizo
saber al subdelegado del Gobierno. En cuanto a las “casualidades”, el primer
edil acusó a los populares de traer este asunto a pleno a sabiendas de que las
obras estaban adjudicadas para que parezca que se hacen por su presión.
Durante esta respuesta, en la que Nieva repasó distintos logros de su gestión, se produjeron numerosas interrupciones desde los escaños de la oposición con las consiguientes llamadas al orden después de que el alcalde reprochara la falta de apoyo de los populares al hospital ‘Virgen de Altagracia’, a la construcción del Manzanares Arena, al propio Manzanares FS, a la rehabilitación de la iglesia de la Asunción o a ermitas como la del patrón cuando se hundió su techo.
Previamente a este asunto, el
equipo de gobierno dio respuesta a interpelaciones realizadas por José María
Molina en materia de vivienda pública, limpieza y seguridad ciudadana.