Según el alcalde, Julián Nieva, se trata de un acto de dignidad con quienes dieron su vida por defender la libertad y la democracia
La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH) ha iniciado este lunes la exhumación de dos fosas comunes en el cementerio de Manzanares con el objetivo de dignificar e identificar a una treintena de víctimas de la represión franquista asesinadas en los meses posteriores a la Guerra Civil, entre mayo de 1939 y noviembre de 1940.
En el cementerio de Manzanares hay enterradas 288 víctimas asesinadas entre 1939 y 1947, según la ARMH. La mayoría, 255, están en fosas comunes intramuros. Hay otras 30, las que ahora se exhuman, que están en dos fosas situadas extramuros, en la zona considerada como no católica durante el régimen franquista y que estuvo aislada del resto hasta que, con la democracia, se integró en el recinto.
“No sabemos qué nos vamos a encontrar”, explica Bonifacio Sánchez, portavoz de la ARMH. La duración de estos trabajos dependerán del estado en el que se encuentren los restos. Todos se conformarán y se entregarán a las familias, ha declarado junto al alcalde de Manzanares, Julián Nieva, que ha visitado el cementerio para transmitir su apoyo y agradecimiento a esta asociación y a las familias. “Se trata de cumplir con nuestra obligación, lo hacemos con mucha emoción, también por lo que representa que España en un país avanzado con una ley que nos dignifica a todos”, ha señalado el edil respecto a la Ley de Memoria Histórica.
Este proceso se realiza con voluntariado de la asociación, que lo sufraga con recursos propios. También colabora el colectivo MemoriaHistórica Manzanares, que en 2016 se constituyó con el objetivo de conseguir este acto que, mediante su identificación e individualización, pretende dignificar a las víctimas de la represión franquista. “Estamos contentos por lo que este acto puede implicar, por contactar con más familias, por abrir el debate social, por la implicación de diferentes instituciones y por romper tantos años de silencio”, ha afirmado José Luis de Gracia, de Memoria HistóricaManzanares.
Y es que, según Julián Nieva, esta exhumación es “un hecho histórico” que cumple con la ley y que dignifica a quienes dieron su vida por defender la libertad y la democracia, ha dicho el primer edil durante su visita al cementerio municipal.
Los trabajos que han comenzado este lunes se extenderán durante dos semanas en las que se rescatarán los restos, se conformarán y se individualizarán mediante pruebas genéticas. Debido a la avanzada edad de algunos de los descendientes directos, ya se han adelantado análisis de ADN a estos. Será un trabajo muy minucioso y necesario para entregar los restos a cada familia.
Esta exhumación ha atraído a familiares de algunas de las víctimas que se esperan localizar. Algunos son manzanareños que tuvieron que irse a Cataluña y Francia. Según Memoria Histórica Manzanares, en el conjunto de las fosas comunes del cementerio hay 140 personas de Manzanares, 40 de Membrilla, 30 de La Solana y otras de poblaciones cercanas e incluso de otras provincias españolas. La mayoría tenían afiliación política o sindical o alguna responsabilidad en colectividades. Todos fueron fusilados tras juicios sumarísimos sin garantías judiciales.
Conforme los familiares del resto de víctimas que se encuentran en las otras fosas vayan reclamando su exhumación, el Ayuntamiento autorizará los procesos, según el alcalde, que ha anunciado la intención municipal de rendir homenaje a las víctimas, una vez identificadas e individualizadas, dedicándoles un panteón o mausoleo en este espacio, ahora con toda la dignidad que merecen.
Las personas que tengan familiares en fosas comunes de represaliados del franquismo en el cementerio de Manzanares pueden contactar con la ARMH o con el colectivo de Memoria Histórica Manzanares, con blog y página en Facebook.