¿Qué está pasando en el Hospital Virgen de Altagracia?

Entre todos lo mataron y él solo se murió.

Parecía  que el hospital Virgen de Altagracia había superado el órdago de venta que desde la presidencia de la Junta de Comunidades de Castilla la Mancha le había realizado Dª María Dolores Cospedal, a través del todopoderoso consejero de Sanidad Sr. Echaniz.

Las presiones de los trabajadores, de la Plataforma en defensa del hospital, algunos partidos políticos  y sobre todo la respuesta de  los ciudadanos de Manzanares y su comarca, parecía que habían dado su fruto y la tan cacareada venta se había detenido.

Plataforma en contra de la privatización del H. V. de Altagracia en Toledo.

La anterior directora a pesar de su buena gestión, la cual fue reconocida desde muchos sectores presentó su dimisión. Vino un nuevo gestor de manera provisional pero con órdenes concretas para implantar recortes, y desde el primer momento “apretó las tuercas” hasta límites insospechados y dejo el terreno allanado a los nuevos responsables.

El nuevo y femenino equipo a pesar de encontrarse las tuercas apretadas y muy bien apretadas, hasta el límite máximo admisible por las roscas de los distintos sectores y servicios del Hospital Virgen de Altagracia, se están atreviendo a saltarse todos los límites que habían establecido el anterior equipo de gestión y de nuevo, día a día están dando una nueva vuelta a las tuercas con el peligro que esto conlleva de que al final la rosca se quiebre por algún lado.

La población usuaria de este complejo hospitalario hemos notado una importante bajada en la calidad de la asistencia y no precisamente por culpa de los profesionales del centro que día a día vienen mostrando su profesionalidad y humanidad, sino por los recortes brutales que se están aplicando y que se corroboran  por los muchos comentarios de los trabajadores de distintas áreas de este hospital.

Al parecer el recorte de gastos en medicamentos ha sido brutal, habiéndose llegado a encontrarse el servicio de Urgencias, en momentos puntuales sin algo tan básico como es el Paracetamol, y no por culpa del servicio de farmacia, como parece que se quiere hacer creer, sino por otras circunstancias de más arriba, como coloquialmente diríamos.

La ropa de uso laboral para los trabajadores, se ha espaciado en el tiempo su reparto, pasando a entregarla cada dos años bajo el argumento de que es de mejor calidad, cosa bastante dudosa cuando al parecer las prendas vienen de un país asiático donde como todos sabemos se confeccionan a bajo coste, debido generalmente a la explotación de los trabajadores que en la mayoría de los casos son niños y de la más que precaria calidad del tejido empleado.

Al laboratorio se le ha vuelto a rebajar el pedido de reactivos para poder realizar las diversas pruebas analíticas que se producen en el hospital y que en este servicio no saben cómo van a poder llevar a cabo las pruebas que les solicitan los distintos servicios ante la falta de los productos necesarios.

El servicio de radiología se encuentra sin radiólogo, ya que el anterior había anunciado hace varios meses que en el mes de mayo se jubilaría, y desde entonces no se ha cubierto la plaza, por lo que la mayoría de las pruebas radiológicas se están derivando al hospital de Tomelloso al no tener radiólogo en el hospital.

Las vacaciones de los diversos trabajadores no se van a sustituir en el periodo vacacional de los mismos, por lo que las plantas y todos los servicios no estarán atendidos como debieran.

Mucho del aparataje que los profesionales de la salud utilizan para valorar las distintas enfermedades que nos aquejan, no funcionan, pero no porque estén obsoletos (que algunos lo están) sino porque no se compran las piezas de recambio necesarias para su reparación.

El servicio de admisión no puede realizar los ingresos ordenados por el personal  médico a pesar de haber camas libres, ya que al parecer desde Toledo se tiene bloqueado el sistema informático y no es posible realizar el ingreso en planta teniendo que hospitalizarse y atenderse muchos casos en el servicio de observación.

Hospital Virgen de Altagracia.

Una gran mayoría de los trabajadores están, como vulgarmente se dice, “con más miedo que una vieja en el expreso” y nadie se atreve a denunciar claramente la situación a pesar de que todos se quejan mediante los comentarios que día a día hacen a sus amigos y allegados de las situaciones en algunos casos esperpénticas que se dan.

Nosotros nos hacemos eco de estos comentarios ya que así nos lo han pedido para que la opinión pública tenga conocimiento de lo que está ocurriendo y en ningún caso afirmamos que sean totalmente ajustados a la más absoluta  realidad, pero al confrontarlos vemos que la mayoría de las veces coinciden con  las distintas fuentes hospitalarias que nos los han hecho llegar y que entendemos que son serias y fiables.

Esta situación nos hace pensar que todo esto está premeditado, y que si no ganaron la primera batalla con aquellos ataques directos, quieren ganar la segunda cruzada utilizando las técnicas medievales tan de moda en la actualidad, como el asedio y sitio de la fortaleza para cortar sus suministros (antes se hacía con el agua y los alimentos), a la que están dejando sin recursos para que finalmente se rinda y caiga sin condiciones en sus manos. 

 

Pero como se suele decir, cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia y esperemos que así lo sea.

-mei-

Concentración de ciudadanos a las puertas del hospital Virgen de Altagracia de Manzanares.