La Visita a la Finca de Pino Montano residencia de Sánchez Mejias lo más entrañable y emotivo del viaje

La Peña Manzanareña Ignacio Sánchez Mejías, ha vivido este fin de semana unos momentos muy emotivos, ya que como culminación de los actos organizados con motivo del 50 aniversario de la Peña, han visitado la ciudad de Sevilla en donde han podido visitar los lugares en donde su mentor desarrolló gran parte de su vida personal y profesional.

No nos hemos podido resistir y les hemos robado (esperamos que no se enfaden con nosotros)  de su página de Facebook el siguiente escrito en donde resumen su experiencia.

Ya estamos de vuelta y cuesta trabajo poder expresar la experiencia tan agradable y enriquecedora que hemos vivido en estas jornadas.

El tiempo, que parecía iba a jugarnos una mala pasada, se comportó correctamente y nos respetó.

Todo ha sido perfecto, los actos se desarrollaron como se habían programado y todos ellos superaron nuestras expectativas. La Macarena, La Maestranza, el “Benito Villamarín”, el Cementerio de San Fernando, todo perfecto.

Lo más entrañable y emotivo fue, la visita a Pino Montano, el hecho de encontrarnos en el lugar donde Ignacio Sánchez Mejías desarrolló, no solo su faceta familiar, sino que lo convirtió en lugar de reunión de la intelectualidad de la España de su época, ya era suficientemente emocionante. Manuel Grosso , que nos acompañó en la Mesa redonda, la define como: “Arcadia mítica” “ lugar de encuentro entre intelectuales y toreros” “ Espacio donde la felicidad es invitada permanente…”

Ni que decir tiene que nuestro conferenciante, José Morente, no solo nos demostró, lo que ya sabíamos sobre lo didáctico y ameno de sus charlas y sus tremendos conocimientos del mundo taurino y de la historia del toreo, sino que vimos en él a un gran comunicador que trasmite la pasión que siente al foro que le escucha. La posterior mesa redonda tuvo las magníficas intervenciones de Paco Aguado, Manuel Grosso y Manuel Sánchez-Mejías, ya os contaremos más adelante.

Pero si hemos de destacar algo de este encuentro y ponerlo en MAYUSCULAS es el cariño, la enorme cortesía y el magnífico e insuperable trato que nos ha dispensado la familia Sánchez-Mejías y todos sus allegados y amigos. Nos han atendido y acompañado en todo momento facilitándonos todo con el mayor agrado. María Dolores,

anfitriona en Pino Montano, su marido y sus hijos hicieron que nos sintiésemos como en casa.

Pepe, Lola, Ignacio, Antonio y el resto de la familia han sido los mejores cicerones y los más cariñosos, amables y entrañables amigos de nuestra peña.

Reportaje Gráfico: José María Márquez Bellón.