Kike uno de los jugadores más destacados del Manzanares F. S. en el inicio de liga

Kike Arias Rubio fue uno de los integrantes de la histórica plantilla del Manzanares FS que compitió en la categoría de plata del fútbol sala nacional en la temporada 2011/2012. A pesar de llegar en diciembre, con la competición ya iniciada, este tímido pívot madrileño, que ha regresado esta campaña al club manchego tras su exitoso paso por Carnicer Torrejón, pronto se ganó, con su juego eléctrico y sus goles, el respeto y la admiración de los aficionados de la "bombonera".

Un respeto y una admiración que es mutua, ya que Kike, al que no le han debido de faltar ofertas tras su buena temporada en Segunda División, ha elegido volver a Manzanares junto a Zamo y Kike "por el proyecto deportivo, el club y la afición".

El joven pívot madrileño, de 21 años de edad, califica de "muy especial" el regreso al club, al igual que lo fue en su primera etapa. "Llegué en diciembre y me encontré un equipo con mucha ilusión y ganas y con una afición increíble que nos guió hasta los play-off".

Precisamente, la disputa de los play-off es, a nivel personal, el objetivo que se ha marcado Kike para esta temporada, aunque precisa que es una meta "a largo plazo" y que lo más apropiado es ir "partido a partido". Eso sí, no rehúye de responsabilidad al afirmar que la meta del equipo que dirige Quique Soto es "estar lo más arriba posible".

Kike está siendo uno de los jugadores más destacados del Manzanares en el inicio liguero. Suma seis tantos en seis partidos, pero el gol no es algo que le obsesione: "Me encuentro cada día mejor, pero los goles son secundarios mientras ganemos los partidos".

Un equipo que, añade el jugador madrileño, "empezó algo dubitativo las primeras jornadas, pero que poco a poco va cogiendo ritmo y mejorando". En este sentido, y aunque será "complicado", Kike espera poder ganar el domingo al líder Orihuela y, con el permiso de Valdepeñas, "intentar ponernos líderes".

Un choque frente al equipo alicantino (el domingo a las 12.00 horas en la "bombonera") en el que Kike espera ver las gradas llenas, aunque subraya que no es necesario hacer un llamamiento a la afición: "Seguro que llenarán el pabellón como siempre lo hacen y nos darán su apoyo incansable que es de agradecer".