Quesos El Hidalgo suma un punto en la pista del líder en un choque de locura

 Movistar Inter 5-5 Quesos El Hidalgo Manzanares

FICHA TÉCNICA

Inter: Jesús García, Raúl Gómez, Chaguinha, Carlos Bartolomé y Pablo Ordóñez. También jugaron: Cecilio, Javi Mínguez, Eloy de Pablos, Lucao, Drahovsky y Bebe

Manzanares: Antonio Navarro, Javi Alonso, Pedro Beraldo, Álvaro y Daniel. También jugaron: Nefi, Humberto, Pedro Herreros, Raúl Campos y Antoñito

Árbitros: Ferrero Carballal y Sánchez Llorente. Mostraron amarilla a los locales Lucao, Jesús Herreros, Chaguinha, Riquer y Raúl Gómez, y al visitante Pedro Beraldo. Expulsaron a Humberto por doble amarilla

Goles: 1-0 Raúl Gómez (4); 2-0 Bartolomé (9); Daniel (14); 2-2 Humberto (17); 2-3 Raúl Campos (19); 2-4 Raúl Campos (28); 2-5 Pedro Herreros (28); 3-5 Pablo Ordóñez (31); 4-5 Cecilio (33); y 5-5 Bebe (36)

Incidencias: Undécima jornada de liga en Primera División.

 

CRÓNICA

Quesos El Hidalgo Manzanares Fútbol Sala sumó un valioso punto en la pista del líder Movistar Inter, en un partido de locura que pudo caer de cualquier lado y que mantuvo el suspense hasta el último segundo. El choque, de los que hacen afición, concluyó con empate a cinco, con dos remontadas incluidas, y un sinfín de ocasiones para ambos bandos. Con 15 puntos ya en el casillero, los manchegos están a mitad de camino del objetivo de la salvación.

Movistar Inter mandó durante los primeros compases del encuentro, ahogando a los manchegos con una presión alta muy efectiva. En el minuto tres, Raúl Gómez, en el segundo palo, puso a prueba los reflejos de Antonio Navarro al desviar un disparo de Bartolomé. Poco después, el jugador albaceteño no perdonó y subió el 1-0 al electrónico del Jorge Garbajosa tras una magistral asistencia de Chaguinha. Manzanares no llegó con peligro a la portería defendida por Jesús García hasta el minuto siete: Humberto recibió un pase filtrado, picó el esférico y portero madrileño desvió córner con la yema de los dedos. Cuando mejor estaban los visitantes, Bartolomé marcó el segundo para el conjunto telefónico, picando la pelota con calidad ante la salida de Antonio Navarro.

Juanlu Alonso paró el partido y tras el tiempo muerto, cambió por completo el escenario. Manzanares metió una marcha más y empezaron a sucederse las ocasiones de peligro y los goles. Daniel redujo distancias en el 14: el pívot conquense recibió un pase de Antonio Navarro, se giró y batió a Jesús García con un potente chut pegado al palo. Justo antes, un disparo de Raúl Campos salió rozando el travesaño. El empate fue obra de Humberto, exjugador de Inter, en una jugada de estrategia. Javi Alonso botó un saque de esquina y el ala-cierre brasileño conectó una espectacular volea desde más 10 metros. Raúl Campos completó la remontada a un minuto del final, también en una jugada de pizarra, tras un saque de banda lanzando por Antoñito.

En el segundo acto, Manzanares tuvo la primera gran ocasión en el minuto 23. Daniel recogió un balón en 10 metros y Jesús García repelió su potente disparo, demasiado centrado. Justo a continuación, Cecilio y Antonio Navarro calcaron la jugada en el otro hemisferio de la pista. Los azulones pisaron el acelerador y antes del ecuador, en el 28, lograron una renta de tres goles. Raúl Campos, a la contra, con una definición sobresaliente, subió el 2-4 al electrónico; y Pedro Herreros, en un libre indirecto al borde del área, con la ayuda de un defensa y el poste, marcó el quinto para los visitantes.

A partir de ese momento, Inter, a la desesperada, asedió el área defendida por Antonio Navarro, liderado por un incisivo Lucao, que estrelló un balón en el poste y a punto estuvo de recortar distancias tras una jugada individual marca de la casa. El 3-5 llegó en un error grueso del Manzanares en la salida del balón que no desaprovechó Pablo Ordóñez. El joven talento jienense fue también quien obsequió a Cecilio con un pase medido para el 4-5. Y el empate definitivo lo marcó Bebe en el 36, aprovechando la superioridad numérica de los locales por la expulsión de Humberto. Desde entonces y hasta el bocinazo final, el choque entró en una espiral de locura y sólo la mala fortuna y las buenas intervenciones de ambos porteros evitaron que hubiera más goles.