Gobernar correctamente y predicar con el ejemplo es dura tarea de los gobernantes. Artículo de opinión de Jerónimo Romero-Nieva Lozano

Hace pocas fechas hemos conocido el resultado de una encuesta CIS (Centro de investigaciones Sociológicas), por la que hemos sabido que el sistema público de pensiones ocupa el lugar principal en las preocupaciones de los españoles por las incertidumbres que están generadas sobre el mantenimiento del actual modelo de pensiones públicas tal y como lo conocemos.

De ahí que la más importante preocupación de los españoles radica, no en la actual escasez de recursos económicos de la seguridad social, sino en la demostrada y reiterada incapacidad de nuestra clase política para concebir y aportar soluciones reales a este grave problema.

La clase política española, dicho sin ánimo de ofender ni exagerar, está demostrando inconsciencia acerca de los cambios que se han producido y continúan produciéndose en la economía y consecuentemente en la sociedad en general, y por ello, a estas alturas, ya deberían estar adaptando sus políticas a la situación actual y a los nuevos retos que en el futuro inmediato se vayan produciendo. Cuando seguimos escuchando las promesas de futuras creaciones de empleo como única solución al problema que nos ocupa nos demuestran, nuestros gobernantes, o bien que no se enteran ni comprenden cómo funciona el mundo actual, o bien nos toman a los ciudadanos por idiotas. De ahí que la preocupación de los ciudadanos que refleja el CIS esté totalmente justificada.

Otro dato, a tener en cuenta, es como algunos tribunos de la plebe, ya se trate de políticos de izquierda y sindicalistas de clase, ya han apostado a nivel personal, y grupal, por la contratación de fondos de pensiones privados demostrando con esto que no creen en sus propios discursos. Y como casi siempre ocurre, y aprovechando la incertidumbre y la zozobra que ha provocado en la opinión pública el miedo a la reducción drástica de las pensiones e incluso a su desaparición, los grandes y posiblemente futuros beneficiarios, bancos y aseguradoras, han lanzado una ofensiva en lo referente a Planes Privados de Pensiones, Fondo de Pensiones que invierten en renta variable, y está ocurriendo como diría nuestro querido y añorado Feliz Rodríguez de la Fuente, los buitres ya vuelan en círculo.

La probabilidad de que el capital financiero, bancos, aseguradoras, gestoras de fondos de inversión sean a medio y largo plazo los grandes beneficiarios es muy alta, y en todo caso será en detrimento de los más desfavorecidos.

¿Por qué hemos llegado a esta situación? ¿Qué ha ocurrido en España? El economista Roberto Centeno dice que nuestros problemas radican por un lado en la mencionada incompetencia de la clase política actual, y en cierto modo la anterior, y por otro lado nuestro modelo de Estado fruto de la Constitución de 1978. Con 17 Autonomías es imposible

sostenerse económicamente. Para perpetuar el Estado de las Autonomías hay que prescindir del Estado del Bienestar, y a la inversa. No es posible la existencia de ambos y hasta ahora solo se sostuvo aumentando la deuda pública que ya supera el billón, y malvendiendo las empresas del Estado: eléctricas, constructoras, petroleras, Telefónica, y un largo etcétera que emprendieron el PSOE en los años ochenta y continuada por el PP desde 1996. Nos queda el recurso a la movilización en defensa del Sistema Público de Pensiones, de lo contrario volveremos a unas condiciones de vida inaceptables en un mundo donde el desarrollo humano y personal creíamos garantizado al superar la barrea del siglo XX.

Jerónimo Romero-Nieva Lozano